El colegio tiene como metas fundamentales el desarrollo de la expresión oral y escrita. Por ello, realizan a menudo actividades de oratoria y de redacción. En la gran mayoría de las clases se usa un libro guía. Además, la lectura es promovida de forma especial a través del plan lector. Los procesos de aprendizaje se presentan a partir de los saberes previos de los estudiantes. Ausubel hablaba de un aprendizaje significativo basado precisamente en “la relación que se puede establecer entre el nuevo material y las ideas ya existentes en la estructura cognitiva del sujeto” (citado en López; 2009: 3). Por lo cual, el docente debe tener como característica fundamental la capacidad de adaptación al contexto que determinen los participantes de los procesos educativos. En este contexto, el docente deberá adoptar de forma flexible las estrategias metodológicas más adecuadas a cada situación. Vigotsky (1978), considera también los aprendizajes como un proceso personal de construcción de nuevos conocimientos a partir de los saberes previos, pero inseparable de la situación en la que se produce. Por lo tanto, los procesos de enseñanza y aprendizaje no se dan solo a partir de los conocimientos previos, sino que deben partir ineludiblemente del contexto de los alumnos y maestros para que en efecto se conviertan en aprendizajes significativos. Desde el punto de vista educativo este puede entenderse como un contexto de desarrollo que promueve las capacidades humanas. Es así como la organización de espacios, de materiales y de actividades hacen parte del diseño de los procesos de enseñanza y aprendizaje.
Jerome Bruner, por su parte, desarrolló el concepto de andamiaje con relación a las zonas de desarrollo próximo de Vigotsky. Este andamiaje se presenta como la acción que puede desarrollar el adulto para llevar al niño de su nivel actual de conocimientos a uno más elevado, es decir es lo que el docente puede hacer para guiar a los alumnos en los procesos educativos. La educación es para Bruner, una forma de diálogo, una extensión del diálogo en el que el niño aprende a construir conceptualmente el mundo, con la ayuda, guía, “andamiaje” del adulto . Es así como Jerome Bruner es tomado como base epistemológica y metodológica para el área de Lengua Castellana, en donde el diálogo entre los participantes se toma como premisa para la educación, como medio para el desarrollo de los procesos de aprendizaje